lunes, 8 de agosto de 2011

XXIII





Por mucho que quiera irme de los recuerdos
que entristecen mi alma... una alambrada
me mantiene atado a este muro.

Por más que le doy vueltas no encuentro
la respuesta a todo esto.
Y es que mientras el corazón bombea gritos de desesperación
mi mente busca la manera de encontrar tus ojos
y un disparo se oye a lo lejos.


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