Temo no ser capaz de resistir tu ausencia...
Después del último adiós todo es predecible,
el miedo que tengo de que ya no estés aquí.
Me asombra el miedo que tengo cuando dejas de existir.
Después de tanto... el eco de tu voz
sigue alborotando mi corazón.
Se me cae el mundo ante la posibilidad
de no volver a sentir tu presencia.
Y es que temo no ser capaz de volverte a ver
aunque siga deseando tanto tu boca... y tu olor.
Meses después lejos estas de mi,
la distancia se ha hecho fuerte
un muro de piedra separa nuestras vidas.
¿Que distancia es la que quieres?
Ninguna distancia quiero yo,
aunque provablemente todo este perdido
el eco de tu voz sigue dandomene fuerzas
para latir fuertemente hasta que nos una de nuevo.
Leeme y haz fuerte mi voz, un único corazón
nos hará latir a los dos...
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